Photobucket

domingo, 5 de julio de 2009

La Milagrosa

En el cementerio Cristóbal Colón de La Habana, uno de los más espectaculares de América Latina, hay una tumba a la que desde hace un siglo nunca le faltan las flores ni las visitas de devotos.
Es la sepultura de Amelia Goyri, conocida como "la Milagrosa", sobrina preferida del conde Balboa, a la que se le atribuyen poderes sobrenaturales desde su muerte de parto en 1901. (...) Un escultor talló la figura de Amelia con el niño y la puso en su bóveda.
Cuenta la leyenda que cuando su tumba fue abierta, 10 años después de su muerte, el cadáver estaba intacto y tenía en sus brazos el cuerpo del bebé que se le había colocado a los pies.
Desde entonces, numerosas personas desfilan a diario por su tumba para pedirle que las ayude en sus problemas, como atestiguan las flores apiñadas alrededor del sepulcro y las lápidas con mensajes de agradecimiento.
En la actualidad, son miles los que, desde diversos rincones del país, la visitan en su morada eterna en busca del tan ansiado milagro. La tradición consiste en saludarla haciendo sonar una de las cuatro argollas de metal que adornan la bóveda y tocando la parte inferior de la imagen esculpida. Los visitantes le dan la vuelta a la tumba y van solicitando su petición, siempre cuidando no darle la espalda a la estatua mientras se recorre el reducido espacio que ocupa.
Se le otorga a la Milagrosa poderes tales al punto de que muchos han pedido su canonización por parte de la Iglesia católica.
"No está canonizada, pero está santificada popularmente", señaló Teresa Aloy, historiadora de la necrópolis.
Pero la tumba de la Milagrosa no es la única que recibe visitas en esta inmensa necrópolis construida en 1871 con un trazado de calles y avenidas como el de una antigua ciudad romana.

No hay comentarios: